Hoy comparto una columna de opinión titulada “Flexibilización sin regulación. ¿Argentina, nuevo eslabón débil en el tráfico internacional de armas?”, publicada en el primer volumen de la remozada revista de la Asociación Pensamiento Penal, a propósito de dos recientes decretos del Poder Ejecutivo que, a mi juicio, no sólo flexibilizan, sino que directamente desarticulan los controles sobre estos materiales. Justamente en un contexto en el que, desde diversos sectores empapados en la problemática, venimos señalando la imperiosa necesidad de reforzarlos, no de diluirlos.